El crack brasileño no está cómodo en Arabia Saudita y ve con buenos ojos un regreso al club que lo vio nacer.

Neymar está siendo mirado de reojo en Arabia Saudita. El Al Hilal invirtió mucho dinero en él, pero las lesiones hicieron que pudiera jugar apenas siete partidos en el club. Por este motivo, la institución analiza rescindirle el contrato a fin de año y el futbolista ya está buscando un nuevo destino para su carrera. La opción que pica en punta es el regreso a Santos, club que lo vio nacer y que está muy cerca de volver al Brasileirao luego de descender por primera vez en su historia. Para eso, el conjunto paulista deberá hacer un enorme esfuerzo económico y cumplir algunas de las peticiones del crack brasileño.

Hace algunas semanas atrás volvió a jugar luego de 370 días, tras recuperarse de una  rotura del ligamento cruzado anterior y del menisco de su rodilla izquierda. En el segundo partido luego de la traumática lesión, jugó media hora ante el Esteghlal por la Champions League de Asia y volvió a salir con molestias físicas. El parte médico confirmó lo peor: una rotura del tendón de la corva, que lo marginará de la cancha entre cuatro y seis semanas.

Ante el agotamiento del conjunto saudí por sus constantes lesiones, el Peixe ya tiene el visto bueno del jugador para comenzar las negociaciones. Su objetivo es llegar de la mejor manera al Mundial del 2026 y cree que la mejor manera de hacerlo es jugando para el equipo del que es hincha. 

Le ofrecerían el salario más elevado de todo Sudamérica, porcentajes por acciones comerciales, por venta de camisetas y una parte de lo que recibirá la institución por la llegada de nuevos patrocinadores. 

Su arribo también vendría acompañada de otras estrellas, para reforzar un plantel que actualmente no tiene grandes nombres. Neymar estaría apretando para que lleguen jugadores de la talla de Gabigol, Paulo Henrique Ganso, Danilo o Léo Baptistão, todos amigos suyos que supieron vestir la camiseta de Santos. Además habría un cambio de entrenador, y el nombre que suena fuerte es el de Jorge Sampaoli, quien ya tuvo un paso por el club entre 2018 y 2019. Igualmente la llegada del oriundo de Casilda no será para nada sencilla, ya que está muy cerca de llegar al Stade Rennes francés.

Hace un año atrás el conjunto Peixe vivió uno de los peores momentos de su historia: perdió la categoría por primera vez en 111 años. El club entró en una rápida e importante transformación y hoy están muy cerca de volver a la máxima categoría del fútbol brasileño. Marchan primeros en la Serie B a falta de tres partidos y, si ganan este lunes ante Coritiba, se aseguran regresar a primera.

El reencuentro se daría en el momento justo. Neymar regresaría al club de sus amores para intentar recuperar ese fuego sagrado que parece haber perdido en Arabia Saudita, mientras que Santos repatriaría al hijo pródigo, que tantas alegrías le dio en el pasado reciente.

El crack brasileño debutó el 8 de marzo del 2009, en la victoria del Peixe por 3 a 1 ante Oeste por el estadual paulista. En total jugó 225 partidos, anotó 136 goles y repartió 64 asistencias con esa camiseta. Ganó tres títulos: la Copa de Brasil 2010, la Copa Libertadores 2011 y la Recopa Sudamericana 2012. También fue elegido como mejor futbolista del continente en 2011 y 2012.