Este jueves se vivieron momentos de mucha tensión en Ámsterdam, la capital de Países Bajos. Los ultras del Maccabi, equipo de Israel, protagonizaron unos incidentes con los manifestantes pro-Palestina tras el encuentro de Europa League del Ajax contra el conjunto israelí. Unos altercados que dejaron cinco personas heridas, 62 detenidos y dos desaparecidos en una jornada caótica.

Los aficionados del Maccabi de Tel Aviv se reunieron en la plaza Dam, en pleno corazón de Ámsterdam, antes del encuentro. Según las autoridades de la ciudad, se vivió una autentica “explosión de violencia contra los hinchas israelíes” después de la disputa del partido en la que se destaca “un comportamiento antisemita” en la que el objetivo era “buscar activamente” a ciudadanos israelíes para “atacarlos y agredirlos”.

Dick Schoof, primer ministro de Países Bajos, ha señalado en las últimas horas que se siente “horrorizado por los ataques antisemitas contra ciudadanos israelíes” en una actitud “completamente inaceptable”. El político ha dejado claro que “los perpetradores serán identificados y procesados”.

Por su parte, Benjamín Netanyahu ha señalado que este “horrible incidente” se debe considerar “con la máxima gravedad”. El primer ministro ha exigido que se tomen “medidas enérgicas y rápidas contra los alborotadores y garanticen la seguridad de nuestros ciudadanos”. Asimismo, Isaac Herzog, presidente de Israel, ha calificado estos actos de “pogromo antisemita”.

¿Qué es un pogromo antisemita?

Este término tiene su origen en una palabra rusa que se puede traducir como “causar estragos, demoler violentamente”. La ciudad ucrania de Odesa está considerada como el primer lugar en el que se realizaron ataques a judíos en el Imperio ruso como disturbios antisemitas en 1821. Unos acontecimientos que se repitieron a lo largo del siglo XIX e inicios del XX.

Unos episodios violentos que tuvieron su apogeo con la Alemania nazi, que acabó con la vida de millones de judíos de forma totalmente organizada y consensuada desde los organismos oficiales. No obstante, el asunto siguió tras la Segunda Guerra Mundial. Un caso muy conocido es el que ocurrió en Kielce, Polonia. En 1946 cuando una multitud asesinó a 42 judíos e hirió a 50.