“La etapa de la CNMV ha sido muy intensa y especial”, ha apuntado

El presidente saliente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Rodrigo Buenaventura, ha señalado este viernes que su salto a la Secretaría General de la Organización Internacional de Comisiones de Valores (Iosco, por sus siglas en inglés) pone en valor el peso del sistema financiero español.

Buenaventura, que abandonará el mando del supervisor bursátil español a mediados de diciembre, ha señalado en declaraciones a los medios durante la jornada de conmemoración del 35º aniversario de la CNMV que la posición de secretario general de Iosco es una forma de seguir contribuyendo a la regulación financiera sobre mercados de valores.

“Ahora en una escala global en lugar de española, como hice antes a escala europea”, ha circunscrito sobre su trayectoria profesional, para seguidamente recordar que la jefatura de Iosco pone a su vez en valor el peso de la CNMV como institución reguladora y su desempeño “muy activo” en el ámbito internacional.

“Creo que es positivo para España el poder contribuir desde una organización con el alcance y con las funciones que tiene Iosco”, ha englobado en relación a su nuevo cargo.

A propósito de su final de mandato al frente de la CNMV, Buenaventura ha valorado que ha sido una etapa “muy intensa y especial” y que han sido “unos años maravillosos”, en tanto que ha remarcado que en el organismo hay una “absoluta normalidad” respecto al proceso de renovación.

Sobre este punto, ha recordado de cara a su sucesión que los nombramientos son competencia del Gobierno: “Cuando se inició el proceso yo informé al ministro y el ministro, la verdad, es que me ha dado siempre su apoyo y se lo agradezco […] Ahora le toca al Gobierno decidir sobre los siguientes pasos que, lógicamente, no me competen a mí”, ha añadido.

“No me voy con ninguna sensación de tarea pendiente o incumplida”, ha enmarcado sobre su salida de la CNMV para ya poner el foco en los retos que abordará al frente de Iosco.

“Es un momento muy importante porque hay cuestionamientos sobre el nivel de globalización de los mercados, sobre el nivel de apertura al capital exterior, sobre normas muy relevantes tanto de finanzas sostenibles como de incorporación de tecnología a las finanzas, con lo cual hay bastantes retos”, ha enumerado al respecto para seguidamente apuntar que son “muy parecidos” a los que ya afronta la CNMV.

“Es un buen momento para contribuir a ese esfuerzo global para tener mejor regulación y, sobre todo, un sistema financiero más seguro, más estable y que preste servicios a los inversores”, ha remachado en su primera aparición pública tras conocerse ayer su salida de la CNMV.

LECCIONES APRENDIDAS MEDIANTE “SUSTOS Y CRISIS”

En el discurso inaugural de la jornada, Buenaventura ha comentado que “hemos aprendido muchas cosas en 35 años, muchas veces mediante sustos y crisis”, y ha incidido al respecto que los mercados acaban poniendo a todos en su sitio y que es fundamental basar las respuestas en datos y vivencias.

Ligado a esto, ha subrayado que una de las más notables metas de la CNMV es la protección del inversor y, especialmente, del inversor minorista.

Por otra parte, y como ha venido siendo habitual en sus intervenciones públicas, Buenaventura ha referido la importancia de abordar el “reto mayúsculo” de revitalizar los mercados financieros, pues las soluciones “no son simples” y requieren de enfoques regulatorios, tanto nacionales como internacionales, así como fiscales y didácticos.

Ha avisado, además, sobre la necesidad de colaborar con actores internacionales, ya que el 80% de las labores de la CNMV está atravesada por normativas internacionales.